Lo ideal de cada lugar que se visita es ir descubriéndolo poco a poco. A mí personalmente me gusta "perderme" sin ningún mapa que mirar y simplemente disfrutar de todo lo que vas encontrando. Y Cabrera tiene muchos lugares donde perderse y disfrutar de la naturaleza.
De todas formas, hay unos "imprescindibles" que hay que conocer. Estos son algunos:
* Playa Diamante. Tengo que admitir que no es mi playa favorita. Aún así hay que visitarla. Ideal para los pequeños de la familia y los "temerosos" de aguas profundas. Puedes caminar sin parar muchos metros hacia dentro del mar sin que el agua te llegue ni siquiera a la cintura. Es una piscina natural donde incluso se puede pescar algún que otro molusco.
* Playa Grande. Esta preciosa playa considerada como una de las más bonitas del mundo se encuentra a unos 15 kilómetros en dirección a la localidad vecina de Río San Juan. Unas aguas mucho menos tranquilas que las de Playa Diamante. De hecho es ideal para los amantes del surf. Pero no se asusten, en este lugar tan bonito te puedes dar un baño en cualquier época del año. Uno de los atractivos de esta playa es que puedes comer en la misma arena de la playa, mientras te relajas escuchando las olas del mar por unos 500 pesos dominicanos por persona (11 dólares u 8 euros).
Playa Grande |
* Cabo francés viejo. Un lugar protegido por su especial belleza. Naturaleza en estado puro. Una mezcla de playas, acantilados, vegetación y ruinas de un antiguo faro y fortaleza española. Lugar perfecto para una excursión de un día.
Aparte de esos lugares "imprescindibles" hay otros rincones que si los encuentras no olvidarás en tu vida. Lo digo por propia experiencia. En futuras entradas muy posiblemente hable de esos rincones inolvidables.
Cabrera: "Entra si quieres y sal si puedes". Personalmente ya comprobé lo que significa eso. Voy a darte un consejo si me lo permites: si no estas dispuesto a "engancharte" a un lugar privilegiado por su naturaleza, no te molestes en visitar Cabrera.
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